Necesitas sanar la relación con tus padres terrenales para sanar la relación con tu Padre Celestial.
Jesús nos enseñó a orar "Padre nuestro". Dios se presenta como un padre, gracias a Cristo, Él nos ha adoptado como sus hijos en su familia. Sin embargo, la relación que hemos tenido con nuestro padre terrenal, afecta nuestra relación con Dios y nuestra manera de relacionar con Él.
No alcanza solo con mencionar esta problemática o esperar que una persona resuelva su situación con su padre y con Dios de manera intuitiva, por eso, es que este material resulta necesario.
Algunas de las herramientas que encontrarás en este libro te ayudarán a:
Si deseas vivir una relación plena con Dios al sanar las heridas o carencias, este material es para ti.